viernes, 25 de mayo de 2018

ALMINAR ANTIGUO CONVENTO SANTA CLARA


Esta construcción, de vida muy prolongada y modificaciones,fué también una de las mezquitaz secundarias de Madinat Qurtuba.
Pese a su compleja arqueologia y cronologia, el edificio revela la planta de una mezquita típica de Córdoba :una sala de oración, dividida en varias partes y presidida por un mihrab que marcaba la dirección de la plegaria, un partio porticado y un alminar.
La mezquita del antiguo convento de Santa Clara, fechada a finales del siglo X o principios del XI,posiblemente construida en el último tramo del califaro, quizás bajo el mandato de Almanzor, también se encontraba en el interior de la medina, pero en este caso sobre la antigua basílica visigoda de Santa Catalina. De ella aún se conserva el cuerpo inferior del alminar, cuya escalera se dispone en torno a un machón central cuadrado, parte de los muros del patio -al parecer porticado al NO y al SE con arquerías de tres vanos- y una de las puertas de acceso desde la calle, hoy integrada en el convento y caracterizada  por un dintel adovelado que se enmarca en un arco ciego de herradura. 
Recreación ideal de la Mezquita de Santa Clara  diseñada en años 60 por el arquitecto D. Victor Escribanos
El más esbelto de los tres alminares que se conservan en la ciudad. Tras la Reconquista fue integrado como campanario en el antiguo convento de Santa Clara. De la segunda mitad del siglo X, es el más tardío de los alminares cordobeses conservados. Presenta un cuerpo de fábrica islámica en su mitad inferior hasta la altura del listel transversal. Lo que subsiste por encima de él corresponde a obra realizada en la Baja Edad Media por los cristianos, siguiendo el trazado de su base. Culmina en una cornisa de almenas escalonadas de ladrillo, aunque en siglos posteriores se añadió el pequeño campanario que ostenta hoy como remate. El cuerpo de la torre es de planta cuadrada. Sus muros muestran paramento liso con aparejo alternante y regular de sogas y tizones. En su interior alberga escalera de planta central con machón central, también cuadrado. Un conjunto de aspilleras situadas de forma desordenada iluminan como tragaluz el interior. Como resto de la mezquita de la que formaba parte se ha conservado una puerta califal de cierto interés. Esta puerta, hoy tapiada, esta formada por un dintel al que se sobrepone un arco de herradura carente de finalidad constructiva, con dovelas ligeramente labradas. Junto a esta puerta destaca un fragmento de muro con falso almohadillado característico de los últimos tiempos de la arquitectura califal.
Actualmente su interior no es visitable.Pero se puede observar dede el exterior varios el elmentos como el alminar y los muros de cierre del noroeste, en la calle Osio, y sureste del patio de la mezquita, este último con una puerta enmarcada por un arco de herradura.


Mª Ángeles Morales Vega

martes, 22 de mayo de 2018

ALMINAR DE SAN JUAN


El alminar de la iglesia de San Juan de Córdoba.-Tiene planta cuadrada exteriormente y circular al interior, con escalera de caracol. De reducidas dimensiones, es obra de sillería, aparejada con irregularidad, en la que generalmente ~ternan un sillar de frente con otro de tizón; en algunas hiladas cada sillar de soga está entre dos de canto, y en otras se cuentan hasta tres tizones consecutivos. En cada uno de sus frentes hay un hueco, abierto únicamente el de Mediodía y ciegos los tres restantes, formados por arcos gemelos enjarjados y de herradura, con prolongación de siete octavos de su diámetro. Tienen tres dovelas en la parte central, de piedra la clave y formadas por ladrillos las dos laterales. Sus juntas convergen a un punto situado bajo el centro del arco, a una distancia igual al cuarto del radio. Los arcos de intrados y extrados son concéntricos y no tuvieron alfiz. - En la parte alta de los frentes de Norte y Saliente se conservan vestigios de una arquería decorativa, formada por pequeños arcos de herradura sobre columnillas de mármol, aprovechadas de construcciones anteriores, cuyos diámetros e incluso sus formas varían; hay una ochavada. Los capitelillos, que conservan algunas, son de volutas, de un tipo esquemático frecuente en la época visigoda y que debió seguirse labrando en los primeros tiempos musulmanes. Remata hoy la obra primitiva, por encima de la arquería decorativa, una imposta de perfil recto, de listel.
Los arcos gemelos y el fondo DE los ciegos · estuvieron cubiertos de un estuco blanco y liso, pintado en la parte correspondiente a aquellos simulando dovelas alternativamente rojas y blancas, no coincidentes con las reales de piedra y ladrillo. Tal vez la planta circular del interior de esta torre responda a una reforma de época cristiana, conseguida rozando los muros y construyendo un núcleo cilíndrico central para la escalera de caracol por la que se llega a su parte alta. Tiene hoy 6 mtrs. De altura desde el nivel del piso exterior, pero es de suponer que el de la calle, en la época musulmana, estuviese más bajo.
Alminar de San Juan en los año 1924
Las ventanas germinadas, son de similares caracteristicas a las localizadas en el alminar de San Juan , aunque en este caso los arcos aparecen tallados en el sillar y no elaborados con ladrillos
La torre hoy está integrada en la iglesia de San Juan de los Caballeros, pero perteneció a una mezquita del periodo emiral (posiblemente datada a mediados del siglo IX) o califal. Tras la conquista por los castellanos en 1236, esta mezquita fue otorgada a la Orden de San Juan de Jerusalén o San Juan de los Caballeros, advocación que ostenta la iglesia que se construyó sustituyendo al edificio islámico, pero del que se conservó el alminar reutilizado como campanario.
Reconstrucción del alminar de San Juan por Felix Hernandez
FRAGMENTO TOMADO DE 

Mª Ángeles Morales Vega

CLOACAS CALLE ANTONIO MAURA



Cloacas Romanas


Uno de los grandes éxitos de la ingeniería romana fue el de resolver el problema del saneamiento de las ciudades, mediante el sistema de la red de cloacas que seguimos utilizando en la actualidad. Esto venía ya preparado, en primer lugar, por la organización geométrica de sus ciudades, con retícula rectangular de cardas y decumanus, y por el ejemplo de la organización también en retícula, pero ahora arborescente, de la distribución del agua, de sus espléndidas conducciones, acumulada previamente en depósitos reguladores dentro de la ciudad, desde los cuales tenían que ramificarse, utilizando necesariamente la primera retícula ya desarrollada en calles que facilitaban la llegada en alineaciones rectas a los puntos donde había de consumirse: fuentes, termas, edificios públicos, casas particulares, etc. Esto ha servido hasta fechas recientes, pues los volúmenes de aguas negras que se lanzaban a los ríos eran relativamente reducidos con relación al caudal que los recibía, por lo cual la contaminación era reducida, y la acción solar podía con ella, realizando la depuración completa de los gérmenes patógenos arrastrados, al cabo de un corto trayecto de circulación natural por la red fluvial





Cloacas C/ Secretario Carretero


Para la evacuación de aguas de  las calles de Corduba  se construyeron  una efectiva red de cloacas. Destacan la cloaca máxima, que discurría bajo el Cardo maximus, localizada en la actual calle Blanco Belmonte; la descubierta en la calle Alfonso XII, aún en funcionamiento; o las tres parcialmente conservadas,  a las que hacemos referencia en este artículo del siglo O dc integrados en 1º planta parking de edificio de nueva construcción (en  C/ Secretario Carretero (esquina con C/ Antonio Maura).





 Diferentes Vistas cloaca central y un pozo musulman


El suburbio occidental experimentó una importante urbanización a taíz de la construcción del anfiteatro, primera mitad del I dC. Los restos consisten en una calzada romana que mide de 15 m de ancho, algo menos cardus  máximus, que tenía 21 m de ancho, incluyendo en esa anchura la correspondiente a los pórticos, que se abrían a la calzada.


               

Diferentes visiones de la Cloaca central y accesorias, registros y base del pórtico

Se trata de  tres cloacas monumentales de calcarenita, una principal y central  de mayor capacidad, de mayor capacidad, relacionada con el drenaje y conducción de las aguas procedentes del anfiteatro y dos accesorias menores destinadas a la evacuación del agua sucia de los pórticos de las casas e instalaciones industriales.
Llama la atención en la construcción de las cloacas, la inclinación óptima para buscar por gravedad la salida adecuada. Con sus correspondientes registros formada por  grandes bloques de piedra de calcarenita también, con altura de unos 70.75 cm, por lo que la limpieza de los mismos se tuviera que hacer con esclavos o niños que pudieran acceder a estas estructuras tan pequeñas.

Se observa un pozo de origen islámico.




 Cloaca accesoria y registro




Cloaca accesoria ,registro y base del pórtico 





Resto via Romana con base de columna pórtico y registro lateral


Destacar que la visita fué muy peculiar, ya que al no haber luz eléctrica en la zona, tuvimos que iluminar con linternas, y nos deparó una visita diferente y divertida con efectos lumínicos singulares . Se pueden visitar siempre que se avise a los vecinos.


Mª Ángeles Morales Vega